domingo, 7 de septiembre de 2014

La Estrella cumplió 50 Años bendiciendo a Puerto Real

Ayer Puerto Real volvió a vestirse de gala para recibir en esta ocasión a Nuestra Señora de la Estrella de la cofradía de la Borriquita de la Villa la cual con motivo del 50 Aniversario de la Bendición y Puesta al Culto de la imagen de Láinez Capote salió en procesión extraordinaria del colegio de la Salle desde las 21h para recorrer las calles más céntricas de la localidad.
Un cortejo que abrió la banda de cornetas y tambores del Cristo de los Milagros, de la hermandad sanluqueña de los Estudiantes a los sones siempre clásicos de Cristo del Amor ó Soledad de San Pablo se iniciaba el cortejo buscando la calle Santo Domingo. Tras la Cruz de Guía de madera, representaciones de las hermandades de Puerto Real y tras ellas algunas de las invitadas a participar por su vinculación lasaliana como fueron las gaditanas de Afligidos y Sentencia entre otras del resto de la provincia.
Minutos más tarde asomaba por el dintel de la casa de Hermandad el palio de Nuestra Señora de la Estrella y a los sones del Himno Nacional y el estreno de A ti, mi Estrella de Álvaro Rosado interpretado por la banda Virgen de la Estrella de Puerto Real, propia de la hermandad iniciaba su discurrir por las calles.
En un recorrido muy seguido por el público pero sin duda la lentitud en el discurrir del cortejo hizo un poco más molesto el recorrido para los que estaban conformando el cortejo. Largos parones motivados por problemas de golpes de calor bajo el paso de la Virgen debido a las altas temperaturas que bajo las caídas se pueden llegar a alcanzar.
Sin duda uno de los momentos cumbres fue tanto la llegada a la Prioral de San Sebastián donde esperaba una representación y donde se rezó y la llegada a la Victoria donde la Soledad había bajado hasta la puerta a recibir a la Estrella en un altar muy bien montado por la mayordomía de la cofradía del Viernes Santo puertorrealeño. A los sones de Soledad de Puerto Real de Abel Moreno se enfrentó y tras el canto “a capella” y acompañado de un piano se interpretó el Ave María de Schubert. Una vez acabado el protocolario saludo la Virgen, con unas dos horas de retraso según lo previsto abandonó la plaza Madre Loreto a los sones de Esperanza Macarena para dirigirse hacia su templo nuevamente por Amargura, Vaqueros, Plaza Jesús, de la Plaza y Santo Domingo llegando nuevamente al colegio de la Salle donde esperará a un nuevo Domingo de Ramos para salir por las calles de Puerto Real. 

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